Este jueves se inició otra jornada de calor extremo en distintas localidades del país. En algunas zonas marzo llegó con temperaturas más elevadas de lo habitual para la época.
En esa línea, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) mantiene para esta jornada nuevas alertas para diferentes distritos.
De esta manera, se mantiene la alerta amarilla en zonas de la Ciudad y provincia de Buenos Aires; Entre Ríos, Corrientes, Misiones, Chaco, Formosa, Santa Fe, Salta, Santiago del Estero, Córdoba y San Luis.
Alertas por calor extremo: qué implica cada nivel
Alerta amarilla:
La alerta de nivel amarillo establece un efecto leve a moderado en la salud, de acuerdo al sistema del SMN.
Implica, en este caso, que las temperaturas pueden ser peligrosas, sobre todo para los grupos de riesgo, como chicos y personas mayores de 65 años, con enfermedades crónicas.
Alerta naranja:
Este aviso implica un efecto moderado a alto en la salud, por lo que las temperaturas pueden ser muy peligrosas, especialmente para los grupos de riesgo.
Alerta roja:
La advertencia de nivel rojo significa que el calor puede tener un efecto alto a extremo en la salud. En este sentido, las temperaturas son muy peligrosas, y pueden afectar a todas las personas, incluso a las que no presenten patologías ni riesgos.
Las recomendaciones del SMN
Dadas las circunstancias, el SMN difunde las recomendaciones para este tipo de eventos que indica el Ministerio de Salud:
Aumentar el consumo de agua sin esperar a tener sed para mantener una hidratación adecuada.
No exponerse al sol en exceso, ni en horas centrales del día (entre las 10 y las 16 horas).
Prestar atención a los bebés, niños y niñas y a las personas mayores.
Evitar las bebidas con cafeína, con alcohol o muy azucaradas.
Evitar comidas muy abundantes.
Ingerir verduras y frutas.
Reducir la actividad física.
Usar ropa ligera, holgada y de colores claros; sombrero, anteojos oscuros.
Permanecer en espacios ventilados o acondicionados.
Recordar que no existe un tratamiento farmacológico contra el golpe de calor y solo los métodos clásicos, citados arriba, pueden prevenirlo y contrarrestarlo.
Fuente: Noticias Ambientales